domingo, 15 de septiembre de 2013

TERRY FOX, UN HÉROE DE LA LUCHA CONTRA EL CÁNCER




En contraposición con malas historias de entidades de minusválidos que con fines picarescos sólo se hacen las víctimas esperando concesiones para hacer negocio y suculentas subvenciones de las administraciones públicas para lucrar a sus dirigentes o gestores que muchas veces ni son minusválidos, ni gentes del país, ni procuran de verdad por la integración, la recuperación y el bienestar del minusválido, impresiona el caso de la vida, ejemplo y dura lucha de Terry Fox, un joven minusválido al que le amputaron por entero la pierna derecha a causa de un cáncer que se le extendía, a la temprana edad de 18 años, y que murió a los 22 años, cuando mientras luchaba por medio de su particular marathon por conseguir fondos para destinarlos a la lucha contra el cáncer, se le volvió a reavivar el cáncer (esta vez en los dos pulmones).


Sin duda, en la historia de la humanidad puede decirse que han habido unas pocas personas extraordinarias que nos impresionen y nos inspiren con su ejemplo, y del joven canadiense Terry Fox bien puede decirse que él era una de ellas, por su increíble historia de lucha, tesón, paciencia y sufrimiento en su lucha contra el cáncer y su objetivo de que cada ciudadano de Canadá pudiera donar por lo menos un dólar destinado para la investigación y lucha contra ese cáncer que sufren miles de personas en su variedad de formas y los sufrimientos que ello conlleva.


Para poder hacer llamar la atención y conseguir sus objetivos de recaudación, estuvo unos 143 días recorriendo el equivalente a una maratón diaria, del extremo este al extremo oeste de su país, a pesar de las duras inclemencias meteorológicas y del extremo dolor que le producía la pierna ortopédica. Un verdadero héroe, un ejemplo de admiración que le honra y que no deberíamos de olvidar.


Un ejemplo de la diferencia entre ganarse las donaciones de la gente, con duro esfuerzo, ejemplo y sacrificio, y la contraposición con aquellos que controlan entidades aparentemente camufladas y opacas que haciéndose las víctimas, y desde una postura cómoda y contemplativa, e incluso muchas veces con una actitud de picaresca, esperan generosas y abundantes subvenciones de las distintas administraciones públicas que obtienen del dinero de los contribuyentes, y que muchas veces van a parar para lucros y enchufes de unos cuantos listos que muchas veces ni siquiera tienen minusvalía reconocida, y además muchas veces ni siquiera están para atender las necesidades de personas minusválidas necesitadas que quedan en un total desamparo y desprotección. En fin, una actitud de un muchacho que murió luchando, y que da mucho para reflexionar.


Os dejo con el enlace sobre el extenso artículo de la wikipedia que hace referencia a su vida: